¡He lit my fire!

Dios mío.

¡Obsesiónnnnnn!

Si es eso, no puede ser otra cosa, no tiene otro nombre, es obsesión.

¿Y qué?

Bah, ya veremos lo que pasa.

Al fín y al cabo, es un tío, un tío más, bueno no, él ggggggggggr.

Me pone y mucho y, ¿porqué?

Es tan raro esto, nose ni que tiene, mira que los hay guapos...Pero...Es lo que hay.

QUIERO TENER DOS PUTOS AÑOS MÁS, DIOS MIO SOLO SON TRES AÑOS DE DIFERENCIA, ¿ESTAMOS TONTOS O QUÉ?, ¿QUÉ MÁS DA?.

Encima rarito, siempre me los busco así coño.

jajajajaja.

Pues eso, mejor me lo tomo a cachondeo porque para lo que hay que ver...

jajajajajajajajajajaja, ¡ES UNA PUTA ORCO/A!

Dale tiempo al tiempo.

I will win.

Nosé ni como te atreves a preguntarlo...
¿Qué porqué te quiero?
Por todas esas sensaciones que provocas en mi, sensaciones que nadie ha conseguido nunca.
Celos, amor, rabia...
Y es que no es lo mismo que pasa con los demás, nose porque pero eres totalmente diferente.
Me encantas, porque eres raro, eres lo peor y lo que me estás haciendo pasar no lo ha hecho nadie.
Me haces sufrir, pasarlo mal, ¿soy masoca?
No, me gusta y punto.
Y lucharé, si, cueste lo que cueste, no soy tan débil ¿sabes?
Y esta guerra no ha hecho más que empezar, derrotare a mis enemigos, quedarán fuera de combate y nada se pondrá por medio, entonces todo saldrá a la luz.

Lucha, mientras puedas.

Kisses.

Pienso en ese momento, pienso en tus labios, en los míos...

Cuándo has estado tanto tiempo esperando que pase, cuando sucede es todo diferente. Es un sueño, pellízcame, necesito saber si lo és y si lo fuera, silencio, no quiero despertar.

Deseo ese momento tantísimo que ya no hay miedos que se interpongan en mi camino, ya no queda nada, es tal el sentimiento que me provoca, que ya todo me da igual, solo me importa él, él y yo.

Puede que solo ocurra una vez o puede convertirse en una adicción, en una droga.

Mi excitane, el que me pone en pie en los momentos que más lo necesito.

Y es que solo él puede cambiar mi estado de ánimo.

No lo soporto, es tan imbécil, tan creído, tan insoportable que a veces lo mataría, ¡que gilipollas!

Quisiera olvidarte, pero ¿cómo?, si estoy todos los días contigo, me resulta imposible y no quiero que te sustituya otra persona, no, ¡quiero luchar!, pero estoy cansada, pues siempre que entro en tu juego, pierdo.

¿Pruebas a adenrarte en el mío?

Always equal.

Solo son sentimientos.

Solo están en mi cabeza.

Solo yo puedo frenarlos o dejar que sigan su curso, torturándome como de costumbre.

La cuestión es, ¿Quiero pararlos?... No, si, no lo sé.

Sé que lo único que consigo con todo esto es martirizarme, y ¿para qué?. A eso si puedo contestar...

Porque no quiero dejar a un lado ese sentimiento, que tan solo él, puede provocar, esas mariposas en mi estómago cuando me abraza, cuando me besa, o simplemente...Cuando me mira.

Porque no quiero perder la energía con la que me levanto cada día por el mero pensamiento de que estaré con el, seis horas, seis horas que si él no está se me hacen eternas... Y ¿de qué sirven los interambios entre clase y clase si él no está?...Nada...¿Y las horas de lengua?...¡Nada!... Sin estar a su lado... Dados de la mano, como dos imbéciles que se quieren, ¿qué cursi, no? Pero me encanta, pues ahora nos une una simple hora de lengua, pero, ¿qué puede pasar más adelante? Todo, o quizás, nada.

Prefiero vivir con esa pequeña esperanza.

Nadie hace las cosas por nada y si él se comporta como lo hace conmigo, por algo será. Yo no puedo hacer nada más, ya no puedo decirle que lo daría todo por él, no, ya no.

Ahora es él el que debe actuar, el que tiene que dejar de pensar en los demás y pensar en si mismo, en darse una oportunidad, en dejarse de gilipolleces.

O no, puede también quedarse como está, viviendo en una mentira y engañándose día tras día hasta que ya sea demasiado tarde, hasta que todo esté perdido, pero claro, es humano, nuestra mayor virtud es, valorar cuando se pierde algo, alguien en éste caso, alguien que has tenido ante tus ojos todo este tiempo, pero que más da, yo siempre estaré aquí ¿no?, ¿eso crees?, pues no, las cosas cambian, las personas cambian y los sentimientos también, cambian tanto que a la persona que has querido tantísimo tiempo puede llegar a ser sumamente odiada.

No pienses, actúa, guíate por los impulsos, quíate por lo que diga tu corazón y no hagas caso a la razón, ya que ésta, no sabe que es amor.